Pedro Almodóvar posando con el Premo Donostia (Foto: Iñaki Luis)

Pedro Almodóvar, Premio Donostia: “Mi vida no tendría sentido sin el cine, la alternativa es el vacío”

septiembre 27, 2024
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El cineasta Pedro Almodóvar ha recibido, de manos de la actriz Tilda Swinton, el segundo Premio Donostia de la 72ª edición del Festival de San Sebastián en el Auditorio Kursaal. La relación entre el director y el certamen empezó hace 44 años después de debutar en la sección Nuevos Realizadores. Al término de la ceremonia se proyectó La habitación de al lado, León de Oro de la Mostra de Venecia.

Pedro Almodóvar posando con el Premo Donostia (Foto: Iñaki Luis)

La gala fue presentada por el actor Eneko Sagardoy, que calificó a Almodóvar como “un maestro del cine atrevido, original y personalísimo”.

Durante la ceremonia se proyectaron dos vídeos. En uno de ellos se vieron momentos icónicos de su filmografía, casi una treintena de títulos multipremiados con galardones como los Oscar, los Globos de Oro, los BAFTA y los Goya, entre otros.

El otro vídeo recogía la vinculación de Almodóvar con el Festival de San Sebastián desde que presentase su debut, Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón (1980) en Nuevos Realizadores Después concursó en la Sección Oficial con Laberinto de pasiones (1982) y regresó, fuera de concurso, con La flor de mi secreto (1995).

José Luis Rebordinos acompañando al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que acudió a la gala (Foto: Iñaki Luis)

El Festival le homenajeó en 1993 con la llamada La noche Almodóvar y también le invitó a entregar el Premio Donostia a Al Pacino (1996), Woody Allen (2004) y Antonio Banderas (2010).

Buena parte de sus películas estrenadas en Cannes y Venecia luego se vieron en la sección de Made in Spain: Carne trémula (1998); Todo sobre mi madre (1999), que recibió el Gran Premio Fipresci en San Sebastián; Hable con ella (2002); La mala educación (2004), que inauguró Cannes; Volver (2006), que también recibió en San Sebastián el Gran Premio Fipresci; Los abrazos rotos (2009), Los amantes pasajeros (2013), Julieta (2016) o Dolor y gloria (2019), por citar algunas de las más significativas.

Tilda Swinton, coprotagonista de La habitación de al lado, dio un discurso al manchego: “Nos has cautivado, divertido, emocionado y acompañado durante casi medio siglo. Y no atisbamos el final (…) Te felicitamos esta noche por tu incomparable aportación a la cultura mundial, por inspirarnos y por suscitar en nosotros un afecto tan incondicional. Has sembrado en cada uno de nosotros infinidad de tesoros. Tu obra hace bien al mundo, te lo agradecemos de todo corazón. Serás eterno”.

Más que nunca, el cine es mi vida”

Almodóvar admitió que, a su edad, un premio como el Donostia puede indicar el final de un camino pero él no lo vive así: “Para mí el cine es una bendición o una maldición. No intuyo otro tipo de vida que el de escribir y dirigir sin pausa”. Advirtió también que la alternativa “es el vacío”.

Pedro Almodóvar. emocionado en la ceremonia (Foto: Iñaki Luis)

“Este oficio es el mejor del mundo y merecía la pena que yo me entregara a él sin limitaciones. Más que nunca, el cine es mi vida y mi vida no tendría sentido sin el cine”, añadió.

El cineasta, que acaba de cumplir 75 años de edad, quiso dar un consejo: “Hagamos lo posible por que las grandes tragedias, el dolor cotidiano, la incomprensión, la mentira, la falta de empatía, la injusticia social, el odio, todo lo negativo imaginable, hagamos que pertenezca a la ficción y que la vida real trascurra de un modo justo, en paz, y muy entretenida por las ficciones que solo existirán en nuestras pantallas. Sé que pido demasiado, pero siempre ha sido así, desde que llegué a Madrid en 1970, pretendiendo dedicarme a dirigir películas. Muchas gracias por este premio, y gracias por escucharme”.

También se refirió a los mensajes de odio que tanto proliferan ahora en el universo digital. “Nunca como hasta ahora el odio ha podido organizarse, de modo anónimo, impunemente. Mi película representa lo opuesto -la empatía, acompañar y ayudar- y ojalá les emocione tanto como a los que la hemos hecho”, indicó.

Almodóvar señalo que la vida, tanto en la ficción como en la realidad, “es compleja y entraña multitud de peligros” pero “sin libertad, la vida no merece la pena”.