La película La parra, dirigida por Alberto Gracia, ha sido seleccionada en la Sección Expanded Cinema del Festival Internacional de Cine de Jeonju, siendo este pase la premiere asiática de la película. Lacinta acaba de ganar una Mención Especial en la Competencia Internacional de Largometrajes del 42º Festival Cinematográfico Internacional del Uruguay.
La Parra tuvo su premiere mundial en la Sección Tiger del Festival Internacional de Cine de Rotterdam (IFFR) y pasó por el Festival New Directors/New Films de Nueva York, su premiere estadounidense, y por el mencionado Festival de Uruguay.
La 25 edición del Festival de Jeonju comienza el 1 de mayo. La Sección Expanded Cinema, programada por Sung Moon, se centra en cineastas de lugares menos representados en los festivales de cine y que rechazan limitarse por los patrones más institucionales.
La parra es una producción de Filmika Galaika y Tasio con distribución española y ventas internacionales de Begin Again Films.
Alberto Gracia es un director gallego cuyo primer largometraje, O quinto evanxeo de Gaspar Hauser (Zeitun Films), se estrenó en Rotterdam y ganó el premio FIPRESCI (Premio de la crítica Internacional). En 2018 volvió al IFFR con La estrella errante, ganando el Premio Deluxe Nuevas Olas en el Festival de Cine Europeo de Sevilla y Premio a Mejor Película en el Festival Dock of the Bay de Donosti.
Su tercer lago relata la historia de Damián, quien participa en un concurso televisivo donde premian la literalidad. Le han colocado su nombre en la camisa. Cuando el programa se va a publicidad, comienza la historia: Érase una vez un hombre de mediana edad que vive de forma precaria en una gran ciudad. Al recibir la noticia de que su padre ha muerto, tiene que volver a Ferrol, su pueblo natal. Tras más de veinte años fuera, Ferrol se ha convertido en una ruina que todo lo atrapa.
«La parra es una película de espejos y espejismos. De imágenes que revelan lo que falta y de faltas que reflejan una imagen. Una película donde el mayor espejo de todos es la palabra, en un mundo mediatizado que ha perdido la capacidad de imaginar. La vida del protagonista se asemeja a una sitcom fantasmal en la que las horas han perdido su reloj», afirma Gracia.
