El responsable de Xbox, Phil Spencer, aborda la situación actual de la industria de los videojuegos y explica por qué hay tantos despidos últimamente.
Durante una entrevista en la Conferencia Anual de Desarrolladores de Juegos, Spencer no pudo evitar preguntarse: ¿Qué está pasando en la industria de los videojuegos? Y, lo que es más importante, ¿cómo saldrán adelante los fabricantes y editores de videojuegos, incluido Xbox?
Para Phil Spencer, la ecuación financiera para crear un videojuego ha cambiado drásticamente. Antes, establecer un objetivo de ventas, definir un precio y calcular un presupuesto eran tareas relativamente simples. Sin embargo, ahora la industria se enfrenta a presupuestos astronómicos que alcanzan los $300 millones para desarrollar un solo juego.
Este aumento en los costos ha llevado a tres problemas sustanciales:
- Reducción del riesgo que los editores están dispuestos a asumir
- Presión sobre los juegos exclusivos de consola
- Estancamiento en el crecimiento del mercado de consolas.
La necesidad de vender millones de copias para recuperar la inversión limita la creatividad en la industria aumenta el riesgo para los nuevos proyectos. Además, los juegos exclusivos se ven afectados, ya que deben generar ingresos adicionales para justificar el subsidio que reciben de los fabricantes de consolas.
Spencer también señaló que el mercado de consolas no ha experimentado un crecimiento significativo en el último año, lo que lleva a una competencia feroz por la misma base de clientes existente.
Estos desafíos financieros han tenido un impacto humano real y devastador, con una ola de despidos en la industria, incluidos los recientes despidos en la división de juegos de Microsoft tras la adquisición de Activision Blizzard King.
Para contrarrestar estos problemas, Xbox ha optado por romper con la exclusividad y llevar sus juegos a otras plataformas, buscando expandir su base de jugadores y revitalizar la industria en su conjunto.
En última instancia, Spencer destaca la necesidad de un cambio en la mentalidad de la industria, alejándose de la exclusividad y abrazando una visión más inclusiva y accesible del juego.
Es un momento delicado para la industria, ya que en lo que va de año han sido despedidos unas 8.000 profesionales. Lo más reciente han sido casi 50 por Ubisoft y hace escasos días una centena por parte de Sega.
