Como parte de la cobertura de RUBIK en el Festival de Gijón 2024, hemos asistido a los distintos eventos de FICXPRO destinados a profesionales de la industria fílmica. Por Juan Galarza
El Festival Internacional de Cine de Gijón (FICX) ha ofrecido durante esta semana distintas actividades que forman parte de FICXPRO, las jornadas destinadas a profesionales del sector cinematográfico que, en coproducción con Asturias Paraíso Natural Film Commission, el certamen organiza desde el año 2017.
Además de las actividades de SEMILLERU realizadas en el paraninfo de Laboral Ciudad de la Cultura (puedes leer nuetra crónica en la que repasamos los 10 proyectos presentados en este enlace), han tenido lugar en el Centro de Cultura Antiguo Instituto (CCAI) varias mesas redondas y ponencias sobre distintos asuntos vinculados con la industria cinematográfica.
Archivo y Cortometrajes
La jornada del martes ofreció dos actividades en el salón de actos del CCAI. La primera de ellas fue la ponencia ‘Sacudiendo el archivo. Itinerarios del proyecto del archivo histórico del Festival de San Sebastián‘, impartida por Irati Crespo, responsable de Artxiboa. En su intervención, abordó los orígenes del proyecto, así como las posibles utilidades sociales y políticas que puede ofrecer un archivo de un festival, más allá de su valor histórico.
Seguidamente, tuvo lugar la segunda mesa del día, titulada ‘Difusión y visibilidad de cortometrajes a través de la nueva producción y distribución‘. En ella, la cineasta Iratxe Fresneda; los productores de MUBOX Studio, Daniel Peña y Alejandro González Clemente, y el director artístico del festival de cortometrajes de Aguilar de Campoo, Jorge Fresneda, hablaron sobre los nuevos retos y estrategias a abordar en los planes de distribución de estas obras cinematográficas.
Fresneda, en calidad de moderador, valoró la evolución del estatus del cortometraje como objeto fílmico al recordar que “hace 10 años no se hablaba de nichos” y que ahora “hay planes e ideas de que un cortometraje pueda ir a un tipo de festival o a otro”.
Precisamente la labor de MUBOX Studio es representativa de esta nueva realidad de los cortometrajes. González Clemente explicó al respecto que son «una distribuidora que selecciona muy pocos cortometrajes porque tenemos que estar muy convencidos”, por lo que siempre se reúnen con los realizadores si hay un cortometraje que les ha llamado la atención. Es ahí cuando ve “la posibilidad que tiene un corto”, por lo que comenta que hay que “analizar muy bien el cortometraje y las posibilidades que tiene”.
Pese a su marcada profesionalización en las últimas décadas, los cortometrajes siguen sirviendo como la puerta de entrada de muchos jóvenes cineastas a la industria. Daniel Peña indicó al respecto que en MUBOX Studio están “muy en contacto con estudiantes» y «en procesos creativos desde el inicio” y que suelen recomendar una duración de entre ocho y diez minutos porque “es más fácil de programar en festivales”.
González Clemente detalló que “si es demasiado largo, se lo hacemos saber a su autor, porque aunque nos comprometemos a buscar los mejores festivales posibles para su duración, tenemos que dejarles claro que no van a tener tantas posibilidades”. Ante esta cuestión, Iratxe Fresneda, que ha estrenado en esta edición del FICX su nuevo corto, Erotatiba, disintió al comentar que “es importante hacerle caso a lo que pide tu historia’.
El proceso de selección de cortometrajes en festivales requiere paciencia y González Clemente explicó la importancia de que, desde las distribuidoras, haya “una labor de concienciación hacia el cineasta” al respecto. Fresneda, en su experiencia como directora, recordó que también conviene considerar la importancia de espacios como los cineclubs o las salas de cultura porque permiten “un diálogo entre la película y las personas”, así como valorar el concepto de cercanía de los posibles certámenes porque en un festival internacional, a veces, «el cortometraje se diluye en la programación”.
González Clemente coincidió con esta cuestión y afirmó que es “fundamental que el cineasta pueda compartir con el público sus impresiones y que, si por ejemplo un corto se hace en Galicia, busque qué festivales se hacen ahí porque significa que podrá asistir y va a conocer a gente de su entorno”.
Inteligencia artificial y digitalización
El miércoles, Carolina Barco, fundadora de INCOPRODUCTION, y Lucía Herrera, directora de antena de la Radiotelevisión del Principado de Asturias, dialogaron en la mesa redonda ‘La propiedad Intelectual de la obra y en la obra cinematográfica ante la IA y la digitalización’.
Moderada por la periodista Sara González, el encuentro comenzó con un vídeo de Herrera preparado precisamente con IA, con el que evidenció la vulneración por parte de esta tecnología de las propiedades intelectuales, así como la generación de personajes femeninos notablemente sexualizados.
“Tenemos que legislar para que una IA no termine legislándonos”. La tajante conclusión de la propia Herrera al término de la mesa redonda sintetiza la respuesta que demandan los profesionales ante el avance de la inteligencia artificial. La especialista en propiedad intelectual calificó de “necesario” que “en el seno de la UE exista una legislación que proteja los resultados y las obras intelectuales de las que se nutre la IA”.
Carolina Barco, por su parte, reconoció que en el mundo del cine existe “una auténtica preocupación por lo que va a pasar con muchos puestos de trabajo”. “Probablemente algunos se precaricen y otros desaparezcan”, afirmó, aunque señaló que, como contrapartida, «aparecerán otras profesiones”. Igualmente, resaltó su impacto en la creación artística y aseguró “que la generación de contenido va a implosionar”, por lo que “si quieres llegar al mercado, vas a tener que destacar”.
Asimismo, Barco señaló que, a pesar de que la IA “es uno de los grandes retos» a los que se enfrenta el sector, «no podemos tratar al mundo del audiovisual como un todo, ya que hay distintos intereses”. Con eso, no se refería únicamente a posibles casos en los que se prescinda de personal humano a favor de la inteligencia artificial, sino también en que existen, por ejemplo, «muchos autores jóvenes que utilizan la IA como un sparring partner”.
Igualmente, Herrera recordó que muchos jóvenes “reconocen que, sin la IA, no podrían hacer algunas cosas porque no existe la posibilidad de hallarlas en su región”. En una línea optimista, Barco añadió que quiere creer que “la IA va a ser utilizada como una herramienta que va a potenciar la creatividad humana”.
En una línea positiva similar, la conversación giró también en torno a la tecnología y sus ventajas. Como responsable de INCOPRODUCTION, plataforma de matchmaking, Carolina Barco explicó que la digitalización permite recoger distintos datos para ordenarlos, analizarlos y ponerlos a disposición de a quien le interese. “Lo que hacemos en INCOPRODUCTION es ordenar esos datos y poner en relación características del proyecto y búsquedas con un cierto interés”, detalló de un sistema que define como «absolutamente democrático” porque “tiene las mismas oportunidades de encontrar lo que busca un productor que ha hecho cinco películas que otro con ninguna”.
Coproducciones y taller formativo
En la mañana del jueves, con el objetivo de establecer vínculos que estimulen las coproducciones cinematográficas, se plantearon dos meses redondas entre asociaciones, colectivos de productores y creadores independientes de Asturias, Cantabria, Euskadi y Galicia.
En la primera sesión, Roi Carballido de Filmika Galaika (AGAPI), Ander Iriarte de Mirokutana (EPE-IBAIA) y Jesús Choya de SINCIO de pelis (LA PACCA) mantuvieron una conversación moderada por Marta F. Crestelo, presidenta de LLUCES.
Jesús Choya explicó que, en el caso de Cantabria, una “cinematografía todavía endeble y germinal” es importante la coproducción porque “ayuda mucho tener compañeros de viaje con los que compartir y contrastar”. “A menudo surgen retos a los que no te has enfrentado antes por lo que necesitas esos contactos”, añadió.
Ander Iriarte, como representante de productoras independientes vascas, recordó que “hay que pensar si tu proyecto es coproducible” y que “lo natural para coproducir es guiarse por las historias”. En ese sentido, opinó que “una de las fuerzas que tiene España es que tiene muchas identidades culturales”, por lo que es preferible que, en el caso de coproducir una película cántabra, “la mayor parte de la financiación sea de ahí a que yo ponga el 80% porque eso desfiguraría, de alguna manera, a la película”.
En una línea similar a la de Iriarte, el productor gallego Roi Carballido lamentó que “se ha negado mucho en España un cine que sea rico en detalles de la región donde se ha grabado”, por lo que “nuestras asociaciones tienen que trabajar en ese sentido e intentar ir mejorando y cambiando la situación”. “Lo importante es creérnoslo, creer en que nuestros territorios tienen historias que contar y talento”, añadió a este respecto Crestelo como representante asturiana en la charla.
En la segunda sesión, moderada por Samu Fuentes (LLUCES), participaron Nacho Solana (LA PACCA), Fon Cortizo (CREA), Roi Carballido (AGAPI) y Ander Iriarte (Mirokutana, EPE-IBAIA), quienes profundizaron en temas como la importancia del contacto personal en el sector, la creatividad en la producción y la necesidad de un equilibrio entre grandes y pequeñas producciones.
El viernes, como última actividad de FICXPRO, el director de fotografía Nacho González impartió el taller formativo ‘Cómo iluminar una película y sobrevivir en el intento’, una actividad concertada con centros de formación donde ofreció a los asistentes consejos y soluciones creativas de iluminación cinematográfica.
Al margen de FICXPRO, el certamen asturiano ha organizado otros talleres con figuras de la industria, como una charla en el CCAI con Montserrat Boix sobre la inserción de información de cine en plataformas de datos abiertos y una masterclass de Carla Simón este sábado en la Escuela de Comercio.
