La tecnología de producción virtual, conocida como Stagecraft, ha transformado la manera en que se pueden filmar los proyectos audiovisuales, eliminando las barreras físicas del “mundo real” y sus costes derivados. Charlamos con los equipos de la producción virtual en Infinia y 16 Escalones, para conocer de primera mano más detalles sobre esta tecnología, sus aplicaciones y el estado actual de su desarrollo en España.
La producción virtual aporta a los equipos de producción y creativos la capacidad de recrear cualquier entorno imaginable dentro de un plató mediante pantallas LED y renderizados en tiempo real. Así, los rodajes pueden realizarse en localizaciones infinitas y diseñadas al milímetro sin moverse de un estudio.
Este sistema permite una optimización de recursos, tiempo y creatividad que está comenzando a ganar terreno en España, desde la llegada de esta tecnología a finales de 2022. ¿Cuáles son exactamente las particularidades de un rodaje efectuado a través de la producción virtual? ¿Se han rodado ya muchas producciones de estas características en nuestro país? ¿Debemos seguir considerando al Stagecraft como una tecnología futurista… o ya pertenece por completo al presente de la industria? Buscamos responder a estas preguntas a partir de la experiencia de dos empresas protagonistas del sector.
Stagecraft: una revolución en la producción audiovisual
No podemos hablar de la producción virtual como un concepto totalmente nuevo. Pero lo cierto es que en los últimos tiempos ha alcanzado cotas altísimas de realismo y eficiencia, gracias a técnicas como el uso de motores de videojuegos en tiempo real como el Unreal Engine, al empleo de pantallas LED de ultra alta definición y sistemas de posicionamiento de cámara que permiten integrar actores y objetos reales en entornos virtuales. The Mandalorian, de Disney+, fue el proyecto que catapultó a la fama a esta tecnología, que hoy en día muchas productoras están incorporando paulatinamente en sus rodajes.
El concepto que sirve de sustento al Stagecraft es relativamente sencillo: reemplazar las tradicionales pantallas verdes de chroma con pantallas LED que proyectan fondos digitales, eliminando la necesidad de posproducción intensiva. Con esta tecnología, la iluminación, las sombras y la perspectiva se integran de forma natural en la escena y en los movimientos de cámara, generando imágenes fotorrealistas en tiempo real.
Infinia: tecnología avanzada en Madrid
El equipo de Infinia cuenta con un propio plató de producción virtual, equipado con las últimas tecnologías en pantallas LED y sistemas de renderizado en tiempo real. “La tecnología que hemos instalado es la denominada VIRTUAL STAGECRAFT -sintetiza el equipo de Infinia– que combina escenarios físicos con fondos virtuales proyectados en pantallas LED. Este sistema permite una integración perfecta de elementos reales y digitales, dando como resultado escenas que, de otro modo, requerirían rodajes en localizaciones remotas o costosos montajes en exteriores”.
Su plató, ubicado en Madrid, cuenta con una pantalla LED principal de 15 metros de ancho por 5 metros de alto, con un ángulo de apertura de 150 grados. Las especificaciones técnicas del plató de Infinia incluyen pantallas de 1000 nits de luminancia y soporte para HDR, que ofrecen una iluminación envolvente para cualquier tipo de escena. Además, disponen de un sistema de posicionamiento avanzado para cámaras, que asegura que todos los movimientos sean replicados fielmente en el entorno virtual.
“El rodaje en un plató virtual te deja una escena prácticamente terminada que exige poca postproducción. Esto se traduce en una gran eficiencia en el flujo de trabajo, especialmente en comparación con el uso del tradicional chroma verde, que requiere más ajustes posteriores. En cuanto a la preproducción, señalan que se necesita una planificación rigurosa, ya que muchos de los cambios en el entorno virtual deben anticiparse antes del rodaje”, afirman desde Infinia.
16 Escalones: una apuesta firme desde Andalucía
Desde el sur de España, la productora 16 Escalones, liderada por el empresario y actor Manu Sánchez, ha implementado también su propio plató virtual en Dos Hermanas, Sevilla. Este estudio se caracteriza por su flexibilidad para adaptarse a todo tipo de producciones. «Nos hemos decantado por una instalación fija con la que podemos abordar no sólo grandes producciones, sino también medianas o pequeñas», explican desde 16 Escalones.
El espacio de 450 metros cuadrados está equipado con una pantalla LED de 1.9 pitch y 1.900 nits de brillo, así como con un sistema de techo LED de 3×5 metros que permite crear escenas envolventes con iluminación tridimensional. Las ventajas técnicas de este plató incluyen un ángulo de visión de 175 grados y un sistema multicámara que facilita la grabación desde cualquier punto del plató. «A nivel técnico, destacamos que esta instalación fija evita el desgaste de los continuos montajes y desmontajes», mencionan.
Una de las grandes ventajas que ofrecen los estudios de 16 Escalones es su capacidad para manejar tanto producciones convencionales como proyectos de realidad extendida (XR), todo con una latencia ultrabaja y un alto rango dinámico. Además, al igual que sucede en el caso de Infinia, su plató es compatible con los estándares internacionales de calidad exigidos por plataformas como Netflix, HBO y Prime Video. «Nuestro plató virtual es sostenible con el medio ambiente, con pantallas LED eficientes, con tan solo 35 kWh de consumo medio por panel», subrayan desde la empresa sevillana.
Ventajas de la producción virtual
Ambas productoras coinciden en que la producción virtual ofrece una serie de importantes ventajas sobre los rodajes tradicionales. En términos logísticos, permite realizar múltiples escenas en localizaciones diferentes sin salir del plató, lo que supone un ahorro en desplazamientos, alquileres, costes de producción y tiempos de rodaje. Según explican desde Infinia, «si se planifica bien el rodaje, puedes estar rodando una escena realista exterior en Madrid, la siguiente en los Alpes, y la siguiente en una playa de Miami».
Desde 16 Escalones destacan la capacidad de rodar en entornos que, de otro modo, estarían restringidos por motivos de conservación o acceso limitado. «Podemos recrear digitalmente espacios con protección patrimonial que impiden el acceso o limitan el tipo de rodajes, como serían escenas de riesgo o con pirotecnia», comentan. “Además, esta tecnología permite controlar la luz natural con un grado de realismo impresionante, facilitando rodar amaneceres o atardeceres durante toda la jornada de trabajo”.
Otra de las ventajas significativas es la reducción de la huella de carbono, ya que se requiere menos desplazamiento de equipos y se emplea tecnología más eficiente energéticamente. Según el equipo de Infinia, «la producción virtual permite un ahorro significativo no solo en términos económicos, sino también en sostenibilidad», y esta afirmación es respaldada por los profesionales de 16 Escalones, que señala el bajo consumo de sus pantallas LED como un factor clave en la apuesta por esta tecnología.
Desafíos en la implementación
A pesar de las evidentes ventajas, tanto Infinia como 16 Escalones coinciden en que todavía existen desafíos en la implementación de esta tecnología en España. Uno de los principales obstáculos es la percepción de que la producción virtual es costosa, cuando en realidad ofrece un ahorro a largo plazo. «Tiene fama de cara, cuando no lo es, y cuesta abrir mercado», afirman desde Infinia, señalando que la clave está en “la planificación y la optimización de recursos”.
Otro reto es la necesidad de contar con profesionales capacitados en el uso de motores gráficos, como Unreal Engine, y otros softwares de producción virtual. Desde 16 Escalones destacan que el rodaje en un plató virtual «requiere concebir el proyecto audiovisual de manera diferente desde su inicio», lo que implica una fase de preproducción mucho más exhaustiva, en la que intervienen creativos y técnicos en estrecha colaboración.
Proyectos destacados y expansión futura
A pesar de los desafíos, ambas productoras ya han acogido importantes proyectos utilizando producción virtual. Infinia ha trabajado en más de 30 producciones, incluyendo cortometrajes como Mermaid Killer y anuncios para marcas como Lexus y Skoda. También han participado en videoclips de artistas de renombre, como Malú y Fito Páez, y en escenas para programas como La Resistencia.
Por su parte, 16 Escalones ha acogido rodajes de gran calibre, como la serie Kaos de Netflix, protagonizada por Jeff Goldblum, y la película El universo de Oliver. También han realizado eventos especiales para Canal Sur y trabajado en spots publicitarios para marcas como Gillette. Además, han colaborado con artistas como Rosalía en su actuación para los Grammy Latinos.
Con una proyección en aumento, ambas productoras ven un futuro brillante para la producción virtual en España. «Desde Andalucía al Mundo», señalan desde 16 Escalones, enfatizando su ambición de posicionar a España como un referente internacional en el uso de esta tecnología. Del mismo modo, Infinia cree que el mercado está a punto de “adoptar esta tecnología de forma masiva, a medida que más profesionales del sector reconozcan sus beneficios”.