‘La Sociedad de la Nieve’: la producción española de mayor presupuesto para contar la historia más grande de supervivencia

marzo 8, 2024
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Los 60 millones de euros que ha costado la realización del film suponen la mayor inversión jamás realizada en una película con sello español. Un esfuerzo de producción que se ha visto recompensado -entre otros reconocimientos- con 12 Premios Goya y una candidatura a Mejor Película Internacional en los Oscar, donde competirá con La zona de interés, Perfect Days, Sala de Profesores e Io Capitano. Por Miguel Varela

Matías Recalt como Roberto Canessa ©Quim Vives / Netflix

«Vengo de un avión que se estrelló en la montaña. Soy uruguayo. Llevamos 10 días caminando. Tengo un amigo herido arriba. Hay 14 heridos en el avión. Tenemos que salir de aquí rápido y no sabemos cómo. No tenemos comida. Estamos débiles. ¿Cuándo nos van a recoger? Por favor, no podemos ni andar. ¿Dónde estamos?»

Esta carta, escrita por Nando Parrado al arriero chileno Sergio Catalán, marcó el final del calvario de los 16 supervivientes del llamado Milagro de los Andes. La historia de cómo un grupo de jóvenes uruguayos cuyo avión se estrelló en la cordillera lograron sobrevivir 72 días en condiciones extremas, enfrentándose al hambre y al frío, fue calificada por National Geographic como «uno de los relatos de supervivencia más impresionantes e intensos de la historia». Una opinión compartida por el director español J.A. Bayona, a cuyas manos llegó el libro sobre esta odisea escrito por Pablo Vierci mientras preparaba el rodaje de Lo imposible. El barcelonés se enamoró de la historia y decidió llevarla a la pantalla.

No era la primera vez que la historia de supervivencia de los Andes era adaptada al cine, Frank Marshall lo hizo en 1993 en ¡Viven! y antes que él había hecho lo propio el mexicano René Cardona en su Supervivientes de los Andes, en 1976.

Sin embargo, Bayona tenía la ambición de contar la historia de una forma que sus predecesores no habían conseguido: sin artificios, sin morbo, sin épica. El director español quería contar la historia llevando al extremo el grado de realismo, con un tono absolutamente naturalista que encarecía las necesidades de producción y requería contar con actores no profesionales. Un planteamiento que provocó que la búsqueda de financiación se alargara durante una década.

Sierra Nevada como Los Andes

Aunque el primer objetivo de Bayona y de las productoras de la película, Belén Atienza y Sandra Hermida, era rodar en las localizaciones originales de la historia, pronto quedó claro que rodar en el lugar real donde se estrelló el avión (conocido como El Valle de Lágrimas) era inviable debido a la inaccesibilidad del lugar, ya que se encuentra a 5.000 metros sobre el nivel del mar entre las escarpadas montañas.

Una vez que quedó claro que no sería posible rodar en el Valle de Lágrimas, la directora de producción, Margarita Huguet, comenzó a buscar localizaciones que compartieran la misma orografía y orientación solar que el lugar del accidente, buscando el máximo grado de realismo. La localización elegida fue la Laguna de las Yegüas, situada en Sierra Nevada a 2.800 metros sobre el nivel del mar.

Esta localización fue seleccionada, en palabras de su productora Sandra Hermida, por «su gran parecido en versión reducida con el lugar del accidente, su excelente situación geográfica y el apoyo logístico que ofrece la estación de esquí». Sin embargo, la adaptación del entorno para el rodaje no fue un camino de rosas: el propio Bayona y parte del equipo sufrieron mal de altura durante los primeros días.

Para replicar el fuselaje del avión de la fuerza aérea uruguaya, se construyó una réplica exacta del avión real, diseñada al milímetro con el mismo tamaño que el transporte original. Incluso se hizo de hierro y se dispuso con la misma angulación, inclinado e incómodo como se alojó el accidentado avión en la nieve.

Además del plató situado en la montaña, el equipo disponía de varias réplicas situadas en los distintos sets de rodaje, preparadas para rodar cuando las condiciones no lo permitieran en el plató de la montaña. Estas se ubicaron en una nave de construcción temporal al pie de la estación, donde también se preparó un decorado con plató virtual y otro backlot en las inmediaciones de Granada.

Producción virtual y una escena de acción para la historia

Entre las escenas de acción de la película, la más difícil fue la del accidente de avión, que requirió una gran planificación y la participación de varias empresas españolas especializadas para dar a las escenas el realismo deseado. Esta parte de la película, según explica a Rubik la productora Sandra Hermida, «fue la última fase del plan de rodaje y se planificó a partir de un animatic preparado por el propio J.A. Bayona. Ésta sirvió como herramienta a partir de la cual los departamentos correspondientes desglosaron las necesidades de cada uno para llevar a cabo cada plano, coordinados por dirección y producción.

El trabajo de producción virtual de MO&MO Film Services fue especialmente clave para rodar la escena del accidente de avión, integrando los fondos virtuales en croma en todos los planos que se filman desde el interior del avión. Arte y Construcción creó un fuselaje que se adaptaba a cada plano, donde todas las acciones eran posibles. El fuselaje instalado sobre un gran mecanismo hidráulico (gimbal), diseñado y construido por el equipo de SFX (Pau Costa) para recrear los dramáticos y violentos movimientos del avión, así como todos los elementos de acción, incluido el impresionante «acordeón» de asientos y cuerpos. Cuerpos retorcidos creados por el equipo de maquillaje especial (DDT), combinados con el espectacular trabajo de los dobles (The Stunt Club). Todo supervisado por el equipo de VFX (El Ranchito), responsable del resultado final de la imagen con todo integrado. Acompañados de un equipo de fotógrafos, cámaras, electricistas y maquinistas trabajando con precisión milimétrica. Y terminando con el espectacular diseño de sonido y montaje. «Un verdadero trabajo de equipo», concluye la productora.

Estreno limitado en cines y éxito mundial en Netflix

La Sociedad de la Nieve rompió la dinámica de los limitadísimos estrenos en salas que Netflix había realizado en España para sus originals. La película está disponible desde su estreno el 15 de diciembre en más de un centenar de salas.

Aunque Netflix no facilita sus datos de audiencia a Comscore, empresa privada dedicada a la medición de audiencias en España, sí está obligada a hacerlo al Instituto de Cinematografía de España (ICAA), que refleja la cifra en su web oficial. A día de hoy, la cinta ha recaudado prácticamente 3.5 millones de euros, y ha sido vista por más de 500.000 espectadores, una cifra importante teniendo en cuenta su limitada distribución.

El 4 de enero de este año, La sociedad de la nieve aterrizó en Netflix e inmediatamente se convirtió en un éxito mundial. Sólo necesitó diez días para superar los 10 millones de visionados, entrando así en el top-10 de películas de habla no inglesa más vistas en la historia de la plataforma.

Hay que tener en cuenta que Netflix sólo ofrece los datos correspondientes a los primeros 91 días del título en la plataforma, que empiezan a contar desde el día del estreno. Pues bien, la película de Bayona acumula en sus primeras 9 semanas un total de 93 millones de visionados lo que la convierte en la segunda película más vista de la historia en esta categoría. La noruega Troll lidera el ranking, con 103 millones de reproducciones.

A nivel global, la película de Bayona se ha mantenido desde su estreno en el top-10 de las más vistas de todas las que ofrece la plataforma.